¡Hola! Hoy te traigo un post muy especial. Sé que hay personas que no tienen mucho tiempo para leer y elegir sus cosméticos, pues justamente pensando en ellas he creado este post.
Ya estamos en Julio y, posiblemente tú seas una de las personas afortunadas que se va de vacaciones próximamente. Yo no, un año más; ¡pero bueno, estos dos últimos años no he podido porque estaba trabajando! Y, quien me conoce sabe que allí soy feliz, así que no me importa. Bueno, que me enrollo, que hoy no he venido a hablar de mí.
Como siempre, nos proponemos tener buenos hábitos en Septiembre/Octubre, luego en Enero… y, normalmente, nos pilla el toro y nos tenemos que conformar comprando la primera crema solar que vemos… Pues bien, ya hablamos sobre protección solar en Marzo, pero, por si te perdiste el post, te voy a contar algunas cosillas:
1. Hay dos tipos de filtros solar fundamentalmente, los químicos y los físicos. También hablamos de un tercero, los biológicos (antioxidantes); pero estos últimos no actúan solos. Habitualmente encontramos cremas solares con filtros químicos (o con los dos). La principal (¿única?) ventaja es que no nos dejan la piel blanquecina como los físicos. Por contra, tienes que aplicártelos con una antelación de entre 15 y 30 minutos, penetran en la piel (salvo cuando están encapsulados estos filtros), no son biodegradables y están acabando con los arrecifes de coral. Para colmo, muchos de ellos son de dudosa seguridad para la salud humana. Te hablo detalladamente en el post que te recomiendo.
2. Tan importante como el cuidado durante la exposición solar es el cuidado después de la exposición solar. No solo hay que hidratar la piel, sino que hay que calmarla y regenerarla de todos los posibles daños que hayan habido. Aunque tú no los veas.
Ya te comenté las cremas que usaba, pero te incluyo las fotografías para que las tengas a mano. Los labios también hay que cuidarlos: yo estoy usando este bálsamo de Apivita con manzanilla y SPF 15.
Respecto al cuidado facial, especialmente cuando estamos de vacaciones, tendemos a ser perezosas/os. Pero recuerda que, a la larga, vas a arrepentirte. No sé si viste aquel estudio que hizo una mujer, creo que era periodista británica, del efecto en su piel al no desmaquillarse cada noche. Pues algo así, aunque no te maquilles.
Cuando llegues al baño, échate un poco de aceite vegetal (si viajas, mejor opta por un bálsamo desmaquillante). Te desharás de los restos de protector solar, el propio sebo que tu piel genere y el maquillaje. Después limpia tu rostro con algún limpiador al agua como, por ejemplo, alguno de éstos y utiliza un gel de aloe para equilibrar tu pH y, además, calmar y regenerar la piel (en la fotografía te muestro el que yo estoy utilizando ahora). Los siguientes pasos los dejo a tu elección (bueno, como todos), pero posiblemente no te apetezca seguir una rutina demasiado elaborada. Mi recomendación, que utilices una crema nutritiva.
Últimamente he estado probando la crema nutritiva con aceite de argán de Garnier Bio. Garnier Bio es una línea vegana y con certificado EcoCert que ha causado bastante revuelo. Principalmente porque a muchísimas personas nos ha chocado que a una línea de Garnier, del grupo L’Oreal, le dieran esta calificaciones. ¿Estrategia de marketing? No lo dudo. Pero, pese a mis primeros pensamientos, leí que alguien decía que realmente era importante que una marca tan comercial sacara una línea así, que si pasábamos de los productos iba a ser más difícil que se popularizara este tipo de productos… Tenían razón (al menos, yo lo pensé así), así que me propuse probar los productos. Tampoco voy a comprar por comprar, los iré adquiriendo según los vaya necesitando. Total, que tengo la crema y me gusta mucho, y la veo genial para usarla en verano. ¡¡Además, puedes incluso llevarla en el avión!!
Si no quieres usarla, te muestro otra opción, en textura gel, por si eres de las que no soportan la textura típica de crema.
Por último, te menciono la hidratación del resto del cuerpo, que no me falta ningún día.
Uso una loción corporal (últimamente estoy usando esta del Instituto Español), después de haber usado un gel respetuoso con mi piel (ya hablé sobre esto en este post sobre cuidado capilar, pero es extrapolable al cuidado corporal). Siempre llevo en la maleta una crema para las manos;y en los labios voy usando un bálsamo o, directamente, un aceite o manteca vegetal directamente.
Resumiendo, rutina facial simple (a tu gusto, vamos), incidiendo en la protección solar, la hidratación (además de agua, fruta y vegetales; que nuestra piel también lo necesita) y la regeneración de la piel.