Pues sí, como os lo digo…
Hace como un año pensé que debería usar un protector térmico para el cabello. Yo recuerdo que nunca di con el que me fuera bien, así que los he dejado en segundo plano… Pero pensé que, ya que cuido los ingredientes de mis champús y bálsamo capilares, uso plantas para teñirme y tratarme el cabello… Era un poco ridículo no cuidarlo cuando me seco y me plancho el pelo.
Intento no abusar del calor en el cabello, pero a veces me plancho el pelo y además, en invierno necesito secarme el pelo con el secador… Así que necesitaba recurrir a un protector térmico. Y empezó la búsqueda…
Me di cuenta que solo encontraba productos plagados de siliconas… Así que pregunté a mis amistades. Mi amiga Bolañitos me enseñó un post de Instagram donde, precisamente, hablaban sobre eso. Había alguno sin siliconas, pero no recordaba haber visto ninguno en tiendas… Y vi uno que sabía dónde lo vendían.
Era de Freshly Cosmetics. Nunca había usado cosas de la marca porque, llamadme rara, pero hay marcas que no me convencen a primera vista; pero bueno, después de ver el producto (aunque pensando que era caro), lo compré.
En verano lo estuve usando más asiduamente, pero en otoño, con el uso del secador, la cosa cambió. Con ese primer bote tuve un poco de «miedo», porque es caro y dura en perfectas condiciones 6 meses solo… Pero nada, se gastó un poco antes. Así que compré otro para cuando lo acabase, pero… El envase es de cristal y se me rompió con el bote casi entero… ¡¡Al menos se rompió en el plato de ducha y no lloré al ver el charco!!
He de decir que, después de probarlo, no me quejo del precio, los ingredientes que trae son estupendos y… Los extractos vegetales cuestan dinero (mucho más que las siliconas), es una empresa española, apuestan por la sostenibilidad, no sólo es protector térmico sino que también es un spray acondicionador de éstos sin aclarado, el perfume es una delicia…
Pero no quería volver a comprar el mismo protector térmico (ahora mismo, seguro que vuelvo a comprarlo). Le eché un vistazo al post que me enseñó mi amiga y no me convencía nada… Después de maldecir e por no haber hecho, como me prometí, una investigación de protectores térmicos para el cabello y dónde comprarlos, me puse a navegar por Internet.
Encontré uno que me pareció interesante, leí el INCI, no me pareció ver nada raro y aproveché para comprarlo con algunas cosas más que necesitaba… Error.
Esa marca es la típica que, parece que está bien (para amantes de la cosmética eco-natural) pero luego encuentras cosas que te chocan. Es verdad que contiene proteínas hidrolizadas (de trigo, de avena), queratina hidrolizada, pantenol… Y, al final del INCI, tiene una silicona.
Pero bueno, ahora tendré que gastarlo. Gastarlos, porque compré dos… Y encima me corté bastante el pelo hace menos de dos meses, así que tengo que usar muy poca cantidad.
Eso sí, quiero aprovechar y tirar más de los champús con sulfatos. Es verdad que, desde hace años, yo no uso cualquier sulfato. De coco o, si está en una fórmula que haya sido certificada por un sello de cosmética eco-natural, el de amonio y, desde hace meses, intento utilizar casi siempre un champú sin sulfatos y una vez a la semana usar uno con sulfatos (de los que he dicho arriba). Porque me he dado cuenta que me va mejor…
Así que volveré a hacer, en unos meses (espero que meses), mi proceso de detoxificación… Yo lo recuerdo como un período interminable. Es un proceso que dura solo unos meses pero…. Eso sí, ahora conozco otros productos que pueden ayudarme (y recurriré a la tijera para acortar la transición…)